Fotografías y textos extraídos del artículo de Finita Molina titulado "60 años de historia del Coro de Torrellano. El ayer y el hoy de nuestra existencia" publicado en El Crisol, nº 6 y nº 7 de 2003, revista del Camp d'Elx editada por Fermín Valero, que, como veréis, también ha participado en alguna etapa de nuestro coro.
Ante todo nuestra oración y agradecimiento emocionado a todos los componentes que han pasado por los distintos coros y se fueron para siempre. Dios los tenga en su gloria. Nuestro homenaje a todos aquellos compañeros que no se mencionan, sería una lista interminable, de esta manera nadie se sentirá olvidado.
En la década de los años 40 y con la llegada de D. Vicente Dimas, comenzó el 'coro' un grupo de gente joven y mujeres del pueblo, con las chicas del chocolate y Concha Díaz 'La Yeclana' al frente, con un viejo armonio que tocaba D. Vicente y un violín a manos de D. Francisco Calatayud, profesor de música que venía por mediación de Concha.
Cuando llegó D. Antonio Fuentes en los 50, el grupo siguió con él, y ya metidos en los años 70 nos trajo a D. José Poveda de una importante parroquia de Elche, vino como director. Fina Peral al frente y D. José Lozano a cargo de la música. Ahí ya empezamos algunas de nosotras.
D. Antonio nos ayudaba en lo que podía, pues por aquel entonces se estaba pagando la nueva parroquia y había muchos gastos, poco más se podía hacer.
Fueron años muy bonitos y gente joven con mucha ilusión.
Cuando vino D. Guillermo Bernabeu a mediados de los 80 trajo a Aurelio, seminarista, hoy ya cura en una parroquia de la provincia. Aprendimos mucho con él, gran director. Y para la música Araceli, Fermín Valero y Francisco, 'Quitín' para nosotras. Éramos un grupo de 25 a 30 personas jóvenes con muchas ganas de hacer grandes cosas. Se compró un órgano, micrófonos, amplificador, bafles, se volvieron a comprar guitarras, etc. Salimos a cantar a muchos sitios, excursiones, y, cómo no, todas las celebraciones del pueblo, incluida la serenata a la Virgen, infinidad de bodas y las de nuestros compañeros que se iban casando.
Llegó D. Miguel Navarro finalizando los 80 y nos trajo a dos compañeros, uno de la Parroquia del Salvador de Elche y Vicente, seminarista y gran organista, hoy también ya cura, siguiendo todos con la misma ilusión.
Nos llegó D. Pedro Herrero en los 90, Fina Peral al frente y 'Quitín' (Francisco Campello) y Pepe Toro (hijo) con la música. Por aquel entonces algunos de nosotros teníamos problemas personales de enfermedades, otros fueron a trabajar fuera y otros tenían que terminar sus estudios y carreras. En fin, vinieron otros tiempos y el 'coro' se aparcó un tiempo. A lo largo de todos estos años ha pasado mucha gente por cada uno de los distintos coros y hemos tenido muy buenas voces.
Estamos en otro siglo y en otra década, la vida ha dado un giro de 90 grados y la gente joven, que antes era el alma del 'coro', ahora se ha desinteresado por todas estas cosas concretas de la iglesia que no hacen daño, aportan mucho: convivencia, camaradería, aprendizaje, valores, etc. Por suerte el 'coro' nunca ha desaparecido. Llegó D. José Antonio Mérida y le expliqué sobre nuestra existencia y me dijo que adelante. Le pedí por favor que nos trajese alguna persona para ayudarnos y vino D. Andrés, y gracias a su ayuda, mi perseverancia y la de mis compañeras, estamos aquí. Porque nos gusta, porque perdemos la noción del tiempo cuando ensayamos horas y horas para que todo salga lo mejor posible.
En celebraciones importantes como La Purísima tirábamos mano de 'Quitín', nuestro 'Quitín' cariñosamente, allí estaba siempre. Gracias a él y a Pepe Toro (hijo).
Por mediación de una compañera nuestra y la gestión de nuestro cura D. José Antonio, conocimos a Doña Manolita Rico, una de las mejores profesoras de música de la provincia, que de su mano nos trajo a Mar. Gracias Doña Manolita.
Mar, eres nuestro ángel, no tenemos palabras para agradecerte todo lo que nos estás enseñando y el bien que nos haces en todos los aspectos, te mereces lo mejor, por tu sacrificio para con nosotras. Te deseamos grandes éxitos en tu carrera musical, por tu esfuerzo y tesón y el sacrificio de tus padres. También sabemos que un día te irás, es normal, eres una mujer joven y no puedes quedarte estancada aquí, encontrarás un trabajo para enseñar a los demás lo que has estudiado y dar todo lo que llevas dentro de ti. Mil gracias. Gracias a tus padres que nos han apoyado mucho, no en balde tu madre canta en una gran coral y sabe de qué va.
Gracias a nuestras familias por apoyarnos y aguantar tantos días de ensayo. Gracias a ese grupo de gente que ha confiado en nosotras desde el principio ayudándonos incondicionalmente, y al pueblo de Torrellano que el día de La Purísima de este pasado año nos lo agradeció inmensamente, eso nos hace fuertes.
A vosotras, componentes y amigas, os animo a seguir hacia adelante, hay que aprender mucho y no bajar la guardia si queremos un 'coro' bueno y digno.
La puerta está abierta para todos aquellos que quieran incorporarse. ¡Vale la pena!
Fotografías y textos extraídos del artículo de Finita Molina titulado "60 años de historia del Coro de Torrellano. El ayer y el hoy de nuestra existencia" publicado en El Crisol, nº 6 y nº 7 de 2003, revista del Camp d'Elx editada por Fermín Valero, que, como veréis, también ha participado en alguna etapa de nuestro coro.
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